El sábado 25 de agosto de 2012 no será una fecha mas para el rugby argentino. Ese día en el estadio Malvinas Argentinas de la ciudad de Mendoza el seleccionado nacional, “Los Pumas”, jugarán su primer partido de local en el Rugby Championship. Habrá que estar atentos a la superposición de horarios en los certámenes regionales. Tercer Tiempo

 

El combinado sudafricano, “Los Springboks” serán sus adversarios en la oportunidad, casi como lo fueron en aquel 1965 cuando nació la leyenda y el nombre del seleccionado nacional.

La fecha encierra un montón de cosas, pero lo que más importa para el conjunto del rugby argentino es la posibilidad de asistir al partido, ya sea en el estadio (cosa reservada a unos pocos) y por la televisión para el resto.

Aquí es importante el dirigente del rugby argentino. El de cada Unión, el de cada Club, el de cada equipo.

No debe ni puede permitir que nada se superponga con el partido, velando por los intereses de todos y no por pequeñas parcelas sectoriales.

En la región litoral, según anticipan los diferentes programas, deberían haber mucha actividad ese sábado.

A nivel regional, no solo se deberían estar jugando las instancias finales de la Zona Campeonato de Primera División, sino también la última fecha de la zona reclasificación que determinará los cuatro clubes que el año próximo jugarán en la elite. Ambas no son poca cosa.

No hay dudas que deberían jugarse el domingo 26, al igual que la fecha del Regional de Menores de 19 años, con postergaciones varias.

Pero a niveles locales la cosa se agrava en el polo Paraná – Santa Fe. Teóricamente hay fecha por el Torneo Dos Orillas de Menores de 15, 16 y 17 años, que decididamente debería jugarse el domingo y no en horarios anormales que no les hacen bien a nadie. Una vez al año jugar el domingo, no es grave, aunque escaseen los referees.

En Santa Fe y Rosario también debería jugarse en la Zona Preparación del TRL, lo que decididamente deberá pasar al domingo.

Si alguien no se enteró de todo esto, no podrá hacerse el distraído.

En esta fecha histórica para el rugby argentino, solo Los Pumas deberían jugar.