Ambigüedad sudafricana

La lectura del resultado es demostrativa de que, sí, hubo una clara diferencia, en ese sentido. Fue Sudáfrica el ganador al anotar 27 tantos contra sólo 6 de la Argentina. Jugarán de nuevo el próximo sábado en Mendoza. Jorge Mazzieri.

Ayer fue en el sur del continente africano. Se trata de la disputa de la primera edición del Campeonato de las Cuatro Naciones, en el que además intervienen Nueva Zelanda y Australia. Estos, en el inicio de la primera fecha se enfrentaron ayer con triunfo de los All Blacks sobre los Wallabies por 27 a 19.

Lo que no hubo en el Newlands Satdium de Ciudad del Cabo, fue un franco traslado al marcador por parte de Sudáfrica, erigido mayoritariamente desde el principio hasta el fin en el dominador del terreno y de la posesión del juego. Un desprevenido hubiera opinado que Los Springbocks no pudieron, no supieron o tal vez también, que no quisieron. Yo pienso que caminaron al compás de la mediocridad, de la indefinición, y también, por último, de la ausencia de un plan determinado. Desde incursiones individuales, algunas de ellas ciertamente con profundas penetraciones en terreno argentino, y otras con exceso de pases regalando la iniciativa y el terreno a Los Pumas, tal como sucedió en los últimos 15 minutos del partido. Los locales, en ese segmento del match necesitaban sólo anotar un try –llevaban tres- para así alzarse con el punto bonus. Durante buena parte de ese tiempo, se instalaron en terreno argentino y además contaron con la posesión de la pelota. Falló la administración. No hubo una determinación clara de qué hacer para encontrar el camino hacia el in goal adversario. Así probaron con el touch cuando tuvieron penales a favor, con el maul sin poder hacerlo progresar, con el ruck cuando eran detenidos, con exceso de pases sin poder avanzar y también con la desesperación cuando debieron soportar dos contragolpes de Los Pumas. Ni una pisca del campeón del mundo de 1995, ni de los memorables test con los All Blacks, o con los Pumas de las década del ’90 o del Mundial 2007.

El seleccionador argentino no puso ayer en el plantel a Martín Bustos Moyano, wing del Montpelier (Francia), goleador del equipo y ubicado entre los primeros cuatro pateadores de los dos últimos campeonatos de clubes de ese país. Ayer la Argentina, frente a Sudáfrica por la primera fecha del Cuatro Naciones, tuvo la posibilidad de aumentar su marcador al intentar cinco penales a los palos muy factibles. Sólo anotó en dos ocasiones.

Opinión

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