Uno de los máximos gurús del rugby, el entrenador de fowards de All Blacks, Mike Cron, evalúa la prueba IRB de la formación fija al acercarse el momento de sacar conclusiones.

Cuando se habla de scrum, hay muy pocos más distinguidos en el mundo que Mike Cron. El experto en scrums de los All Blacks esta reconocido mundialmente como el máximo especialista en formaciones fijas del rugby, la fuerza intelectual que está detrás de los ocho Kiwis guiándolos con un cuarto de siglo dedicado a entrenar en el terreno.

Mirando videos de las sesiones de Cron, su voz denota el mismo notable entusiasmo cuando trata de mejorar aún más el funcionamiento una de las mejores primeras línea del mundo, la de Nueva Zelanda. Tiene una visión que es compartida por muchos de sus contemporáneos. Si hablamos con Graham Rowntree, Massimo Cuttitta o Greg Feek encontraremos el cariño con que definen a alguien importante en el rugby que grabó su nombre en los últimos años y que brilla todavía.

Se hablará alegremente durante horas interminables, cubriendo especialmente matices de las formaciones fijas, métodos de comprobación, fuerzas de asimiento y configuraciones: el scrum en el rugby de élite se ha convertido en una ciencia, muy alejado de la medición graduada de los años idos, de los 16 pesados fornidos agachados, vestidos con camisetas de algodón y agarrados de una manera vagamente coherente, pero cuando Cron compara el asimiento de su pack con el golpe en swing de un golfista, practicando la técnica una y otra vez, se hace evidente que el formar el scrum para los Kiwis es una constante búsqueda de la perfección.

Cron fue miembro del IRB Steering Group que, en conjunto con la investigación de la Universidad de Bath, resultó en los cambios en la formación fija que ahora estamos viendo practicar, la secuencia  de asimiento en tres paso, cuclillas, tomarse, ya., el énfasis agregado sobre la estabilidad del scrum, la introducción  derecha y por lo tanto, el largamente esperado retorno al hooking en el alto nivel.

Estos cambios fueron pensados fundamentalmente para mejorar el bienestar del jugador, en donde los investigadores de Bath comentaron que el scrum contribuía a una cantidad desproporcionadamente alta de lesiones (40% del total de lesiones catastróficas) relacionándolas con el tiempo que los jugadores pasaban empujando agachados, pero, además IRB se preocupaba por la declinación en el rugby de élite del scrum como aspecto funcional, integral y estético de este deporte. Las estadísticas del Seis Naciones 2013 muestran que aproximadamente el 30% de los scrums hubo que volverlos a formar, al  mismo tiempo que el partido Escocia con Irlanda de ese mismo año en Murrayfield mostraba que la formación fija se tragaba 21 minutos del tiempo de juego.

Más recientemente, cuando la prueba ya alcanzó la mitad del tiempo planeado, superficies de juego espantosas en Cardiff, Paris y Edinburgo mostró primeras líneas golpeando el suelo y scrums tambaleantes volviendo a sacudirse imperfectamente en el rugby de alto nivel ¿Están funcionando las modificaciones al reglamento? ¿Los jugadores y entrenador compraron los cambios? ¿Hemos avanzado algo con respecto a lo logrado en el año anterior?

En general, creo que estamos orientados en la dirección correcta, dice Cron. Las estadísticas del último Seis Naciones fueron mejores, aunque algunos partidos se jugaron en superficies muy difíciles para tener buenos scrums. En algunos partidos del Súper Rugby estamos logrando estadísticas extraordinarias. En otros estamos al mismo nivel que con el viejo sistema.

Con imágenes de jugadores de la primera línea en cuclillas y preparados para chocar como si fueran velocistas esperando el ruido del pistoletazo, ahora ya confinadas al recuerdo, el corto y violento asimiento ha sido reemplazado por una nueva prueba de resistencia, Crou habla de carga isométrica, donde los packs deben, en efecto, mantener su posición de empuje, permanecer fuertes por más tiempo mientras los músculos arden, el ácido láctico hierve y el esfuerzo consiguiente cobra peaje. Es esto lo que lleva a la escena nada cómica de 16 hombres presionando con todo lo que tienen mientras la pelota se queda tercamente lejos del alcance en el túnel.

En un reciente partido de Súper Rugby, cuenta el experto en scrums, la pelota permaneció en el medio, sin ser tocada, por casi 13 segundos halando con los jugadores, especialmente con los cabeza suelta, me han contado que han encontrado que tienen menos rigidez y dureza muscular en el cuello y espina dorsal después de los partidos. Hay muchos menos colapsos violentos, como si los había con el viejo sistema, lo que debe considerarse bueno, explica Cron, pero ahora hay fuerzas diferentes que prevalecen más, concretamente la carga isométrica. Con esto quiero significar que con el anterior sistema, el tiempo total desde el asimiento hasta que la pelota saliera era de 3,5 segundos (promedio de la última Copa del Mundo), durante ese lapso, la carga isométrica podría llegar a ser de solamente un segundo dado que había mucho más movimiento y frecuentemente la pelota se introducía mientras se estaba avanzando.

Con el nuevo sistema el tiempo total del scrum ha aumentado. La cantidad de carga isométrica ha crecido significativamente debido a la estabilidad. Por lo tanto, los jugadores de alto nivel han experimentado mucha más carga por todo el cuerpo, en particular la parte inferior de la pierna.

No tengo noticias de algunas lesiones adicionales, solamente más dolores musculares. Por  lo que nosotros los entrenadores debemos entrenar a nuestros jugadores para adaptarlos a esas nuevas fuerzas para prevenir lesiones Cron reconoce que ahora es mucho más fácil para los referees tomar las decisiones correctas en el momento del scrum, en tanto se centren en las cosas grandes en lugar de las minucias de la formación fija.

Realmente, él confía en el momento del futuro cercano en que los medioscrums introducirán la pelota cuando ellos decidan, y no cuando se los ordene el oficial.

IRB es conciente de sus preocupaciones, pero sigue temerosa de que quitando la instrucción del referee se podría proclamar el regreso del golpe y caída, con los packs retumbando en la marca antes de que se introdujera la pelota, pero el Kiwi argumenta que los redactores de las leyes deberían seguir el modelo del lineout en ampliar el canal, aliviando la presión sobre el hooker , quien, por el momento, debe ejecutar un acto de contorsión imposible para llegar hasta la línea media entre los dos packs hice algunas pruebas en el alto nivel y para que el hooker esté en una posición de empuje segura después del asimiento, la distancia entre la parte delantera de su pie y la pelota en la línea media fue de 105 cm, afirma Cron.

Por lo que pedirle a un hooker que enganche una pelota que está ubicada en la línea media lo llevará a un posición insegura y recién así podría probar de alcanzar la pelota es totalmente peligroso insistir con que la pelota debe ser introducida en la línea media. El scrum debe estar alineado con el lineout. En el lineout la pelota debe ser arrojada hacia cualquiera de los lados internos de los hombros de las dos líneas que están paradas separadas por un metro.

Les he pedido a los hookers que golpearan la pelota cuando pensaran que podían alcanzarla sin riesgo y llegar hasta ella con su pie. La distancia entre la punta de su pie y la línea media fue de 60 cm, el largo de dos pelotas de rugby. En estos momentos el reglamento permite el largo de una pelota de rugby para cada lado de la línea media. Es necesario ensancharlo. Recientemente tuvimos una reunión en relación a esto y los referees están permitiendo que el medioscrum se pare a la derecha del centro para permitir que la introducción pueda ser enganchada por el hooker desde una posición de hooking sin riesgo. Pero la pelota debe ingresar derecha.

Alguien que crea que en el alto nivel un hooker puede enganchar la pelota desde la línea media no ha formado en un scrum de estos días modernos. La línea media es donde se juntan los hombros de los hookers. Por lo que le estamos pidiendo al hooker que levante su pierna y la lleve a estar delante de sus hombros. La pierna tiene que estar delante de la línea media dado que él tiene que lograr que su pie pase sobre la pelota para engancharla hacia atrás.

Simplemente, pónganse frente a una pared en posición de scrum y levanten una pierna (no importa cuál de ellas) de manera que que llegue a estar delante de sus hombros. Se darán cuenta de qué estoy hablando.

Como la receta y los remedios de cualquier especialista, pareciera que con un simple cambio se aliviaría un montón de sufrimientos

Por Jamie Lyall