Fue una victoria agónica pero merecida. El drop de Estanislao Pérez  al filo del partido selló un triunfo justo para Tilcara. Esa conquista marcó el 16 a 13 y se  hizo justicia. No se le podía escapar al conjunto paranaense este logro que construyó en base a defensa, actitud y ambición.

El verde fue superior a CRAR de Rafaela en el balance del partido que marcó el inicio de la segunda fase del Regional del Litoral en la Zona Reclasificación , donde 12 elencos luchan por seis plazas en el nivel superior.

Tilcara tuvo sus puntos altos en el tackle defensivo, en la actitud para disputar el ruck y en la supremacía en el duelo de forwards más allá de que el primer tiempo fue dominado en el scrum.

La victoria fue resonante. La más valiosa de los últimos años para el conjunto de la UER, sobre todo porque jugó ante uno de los equipos que viene del grupo principal.

Hubo festejo en el quincho de la ruta 18 pero también un plus de convicción que ratifica el buen andar encontrado en los últimos tiempos por el elenco entrerriano. Fue cerrado, muy cerrado el encuentro, y además emotivo. Fue palo y palo.

El primer período finalizó 13 a 13 con iguales logros por lado. Tilcara anotó por medio de un try del jugador más destacado de la cancha, Leandro Schonfeld, sumado a una conversión y dos penales de Yamil Zatti, quien sin embargo no tuvo una de sus mejores tardes. El CRAR sumó por la misma vía con tantos anotados por su escurridizo apertura.

EMOCIÓN

En la segunda etapa Tilcara realizó cambios en la primera línea y emparejó el scrum, formación determinante para imponerse en el juego. Y ahí acentuó la supremacía que sin embargo no podía plasmar en puntos más por errores propios, sobre todo en el manejo por el juego abierto, que por virtudes ajenas.

Era de dientes apretados y emotivo el encuentro, tanto dentro como fuera de la cancha. Con el correr de los minutos la parcialidad local se empezaba a ilusionar con lo que en los papeles previos parecía muy complicado.

Corrían los minutos y la cancha continuaba inclinada a favor del verde que tuvo más de una oportunidad de aumentar el marcador con penales factibles y con ocasiones de tries. El festejo venía madurando pero no se podía sellar. El 13 a 13 seguía inamovible y el final del encuentro estaba al caer. Los nervios arreciaban y un error defensivo podía ser letal para cualquiera de los dos.

Pero se hizo justicia. A dos minutos del epílogo Estanislao  Pérez, que se había corrido del puesto de medio scrum al de apertura, tomó una pelota en línea recta a los palos a la altura de la línea de 22 metros y sacó su patada de sobrepique que tuvo destino de gol. El acierto desató la algarabía, aunque aún contenida. Faltaban dos minutos y solo había que defender. Fue lo mejor que hizo en la tarde Tilcara y no podía fallar en eso. Y no falló. Y festejó. Y hubo abrazos en la tribuna y ronda y arengas del plantel en el centro de la cancha.

Un gran inicio. Para ilusionarse con el ascenso. Para convencerse que un club con tanta historia puede formar parte de la elite en el Litoral.