La ovalada siempre hace maravillas y es más que un producto de este fascinante deporte. Conforma relaciones, hace amistades hermosas, trasciende fronteras en lugares inesperados y se encuentra en cada rincón de nuestro país. Hoy, la vista está puesta en la ciudad de Monte Caseros, más precisamente en la vecina provincia de Corrientes.
Gabriel Coppini, es uno de los fundadores de Monte Caseros Rugby Club, así como también es alma y vida de una entidad hecha a base de pasión, entusiasmo y más que nada, esfuerzo. El protagonista dialogó con Tercer Tiempo y relató la historia de su querido club.
“Éramos un grupo de ex jugadores y algunos que todavía estaban en actividad. Realizábamos convocatorias o nos reuníamos habitualmente en diferentes lugares con la intención de mantener el espíritu del rugby, porque es una vivimos una diferente. Teníamos ganas de establecer y de crear cosas nuevas, continuamente en innovar”, dijo.
“Comenzamos a trabajar en categorías juveniles, junto a Luciano Toledo, (quien es su amigo y están hermanados por un mismo sentimiento), y llevamos adelante este proceso. En poco tiempo afrontamos una serie de encuentros amistosos en ciudades aledañas a nuestra localidad, que nos permitía tener rodaje, y así también difundir nuestro proyecto”, continúo diciendo.
Luego de reiteradas reuniones y tras un año de idas y vueltas burocráticas, formaron una anhelada comisión directiva que le permitió obtener una persona jurídica. De esta manera, a mediados del año pasado, con Martín Iraztorza a la cabeza, concluyeron establecer legalmente al Monte Caseros Rugby Club.
Además, con 42 años, también conforma el cuerpo técnico, y expresó: “Con el transcurso del tiempo, se sumaron muchos chicos con ganas de integrarse, de formar parte de esto que se vuelve maravilloso. Los invitamos a integrar nuestra institución, a participar en nuestro club. El apoyo de muchos padres, es fundamental para que esto pueda llevarse a cabo”.
“Un logro muy importante fue conformar el plantel superior, pero no nos quedamos solo con eso. A partir de eso, uno de los objetivos principales fue, y es actualmente, detectar a chicos que pueden estar en la calle, en las plazas o en una situación social vulnerable”, sintetizó.
Asimismo, Coppini hizo referencia sobre los objetivos que tienen en mira: “Tratamos de mejorar día a día. En este momento estamos trabajando en el predio con el propósito de dejarlo en óptimas condiciones, para afrontar los respectivos torneos que se vienen adelante”.
“Este año vamos a tratar de mejorar nuestra actuación, ya que vamos a competir en el mismo torneo. La idea primordial, es afianzar las categorías infantiles y juveniles, necesitamos incrementar nuestro semillero, ya que con un trabajo constante el fruto se podrá percibir en los planteles superiores”, finalizó.