Un tercio, dos tercios y tres tercios

Por orden alfabético: Córdoba, Entre Ríos y Santa Fe. Las tres provincias unidas conforman un conglomerado demográfico rugbístico realmente superlativo. Al enumerar las localidades en las que se practica el rugby en esos tres territorios se construirá sin dudas una lista que, en lo cuantitativo, me animo a ubicarla en el primer lugar en el país. O si se comprueba lo contrario la colocamos en el segundo lugar. No cambia nada.

POR JORGE MAZZIERI, DESDE CÓRDOBA

Pero resulta que dos provincias, de estas tres, hace un tiempo que de mutuo acuerdo han decidido disputar un torneo anual. Realmente una iniciativa ponderable. Esos Estados son, por orden alfabético: Entre Ríos y Santa Fe. Los une (¿los desune?, ya veremos) el Río Paraná. Ambas, con más o con menos en lo numérico, componen dos terceras partes del conglomerado señalado.

“La compatibilidad en el deporte de tiempo libre del rugby amateur de clubes que cobija nuestro torneo”.

Resulta que la mesa directiva de dicha competencia (Torneo de Rugby del Litoral) ha descubierto que un club que tiene sus plantas puestas en la provincia de Entre Ríos, no cumple con este artículo, el que cito en el sub título que encabeza este párrafo, dicho de otra manera: el Club Universitario de Concepción del Uruguay (de él se trata) descompone la armonía que necesita dicho Torneo para desarrollarse como tal. Pero resulta que la mesa directiva lo dispone así porque opera en mayoría, cupo que es de la Unión de Rosario (de Santa Fe). O sea que si alguna vez a dicha mayoría la completa otro sector, el CUCU bien podría dejar de ser transgresor. En síntesis, se trata de un torneo cuya plantilla debe satisfacer, en su totalidad, el gusto y paladar de esa mesa.

Pero esa mesa siempre será esa mesa. Y es porque esa mayoría es de la Unión de Rosario. Sí, también ocupan algunos lugares Santa Fe y Entre Ríos que son las otras dos Uniones que componen el mapa, pero Rosario es la más grande. Y a Rosario le queda incómodo viajar a Concepción del Uruguay (Entre Ríos). De esta ciudad es el club Universitario y este club desde que nació -fue hace algunos años ya- decidió crecer. Así fue como en el 2014, siguiendo el itinerario requerido para adjudicarse un lugar en el Nivel 2 de la 2da División del TRL, lo consiguió. Pero no, la incorporación a ese nivel del TRL no se consigue por mérito deportivo. Así reza el reglamento. O sea que en el primer –o segundo- conglomerado demográfico rugbístico de la Argentina se está disputando una competencia entre clubes que tienen prohibido, básicamente, mostrar algún mérito deportivo.

Digo, y es sin ninguna connotación política nacional: de acurdo a lo expuesto, puedo asegurar entonces que en el litoral la práctica del rugby no se realiza con espíritu inclusivo. El rugby (por orden alfabético) en Entre Ríos y Santa Fe es absolutamente selectivo. En síntesis: prohibido crecer.

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